venerdì 9 ottobre 2009





Y sin darme cuenta, amaneció el día en el cual todo cambia.En mis sábanas apareció arena de playa, y me volví líquida esperando ese milagro, esperando respuestas, esperando a que los días pasaran de golpe por el ojal de la historia.
El universo me ha enseñado una gran lección: cuidado con lo que pides, pues se te puede cumplir.


Hoy, soy otra, no soy la misma que escribió el último post. Soy Alba, pero un Alba llena de gratitud hacia el universo, llena de incredulidad acerca de que este tipo de cosas puedan ocurrirme, que me llegue todo este sentimiento de paz, de alegría por las pequeñas cosas, de gratitud por los breves instantes....


No tengo palabras para describir nada de lo que siento ahora.



Mi huida se adelanta a este martes que viene: Martes 13, que gran día para volar hacia ese lugar que tantas veces ha escudriñado mi imaginación. Es el día que cambia mi vida (como si no lo hubiera hecho ya lo bastante hasta ahora) y ahora de momento solo puedo correr histérica de un lado a otro de la habitación pensando en todo lo que he de hacer antes de irme, en todo lo que quisiera seguir haciendo, en toda la gente que me va a acompañar aunque sea en la distancia....


Me imagino sentada en ese tren, me imagino volando por encima de campos sin fín, me imagino pisando por primera vez Italia, caminando por primera vez mi nueva vida...






Y como ya dijo Bebe: Siempre me quedará la voz suave del mar. Y el que tiene que entender esto ya lo habrá hecho ;)

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miauuu