Poco me puede quedar por decir a estas alturas, poco nuevo quiero decir...

Se acerca irremediablemente el final de esta aventura, para bien o para mal.

Y necesito más que nunca volver a casa, o parar el reloj y volver esto eterno...

No se explicarme, no puedo explicar con mayor exactitud el eterno sentimiento de alegristeza de deprenuria, de eufobajona en el que me hallo.

Son muchas cosas atascadas en el cuello de la botella queriendo salir, son muchas alegrías y penas en este lugar.

Muchísimas las añoranzas y las energías ganadas y perdidas.

Pero como bien dijo alguno que sabía de lo que hablo, lo bueno si es breve dos veces bueno... dejemos pues la alegría del vivir en esta realidad enlatada en este breve pero a la vez eterno año para el recuero.

Igualmente, gracias a mis pes, por darle vidilla a este incesante chorreo de tranquilidad, por ayudarme a dar el pestillo final a este verano que daba unos coletazos de aburrimiento colosales.

Es el devenir del día de la marmota lo que me exaspera, la eterna sensación de estar viviendo again and again the same fucking day....

Poco más que decir, tan solo que aquí estaré sentada en la puerta de Santa Chiara, a ver las horas pasar muertas mientras consumo el resto de los días en compañía de los seres de esta burbuja.

A tí solo te puedo decir un número: 41....y abril es ya!

Tonight tonight

Pues si, esta noche me paro a pensar en el tiempo. Lo breve que resulta en algunos momentos, lo jodidamente impasible y largo en otros.

Por un lado quisiera que este mes y un puic que me queda pasara volando, que las cosas se aceleran, que pasaran por el ojal de la aguja y la historia comenzara a coserse. Pero me doy cuenta tambien de que me hago la dura y la tal y cual y bleh, pero al fin y al cabo soy una cobarde enmascarada, una "pero con huevos por encima" que se tira p´alante con lo que sea, aunque después en intimidad le tiemblen las rodillas del miedo.

Pienso en como un mes puede significar un universo entero lleno de otras realidades, o lleno de cotidianeidades en este agujerito en el cemento, lleno de guetto blasters con los que sobrellevar la carga de normalidad entre risas y silencios... como un mes puede estar lleno de vacío, de madrugadas insomnes, de los fondos del pozo, de pequeñas punzadas de ingratutid al volver después de cada guetto a la luz del día...

Y pienso en como será mi vida dentro de un mes, como viviré las cosas que ahora siento y pienso, si habré llegado a la recompensa, viva después del absurdo de este jodido septiembre. En cómo haré para comunicarme con las gentes de bien que me encontraré. En cómo serán esas pequeñas criaturas de lo absurdo y del amor. En cómo de verdes serán los campos que me esperan para ser rodados, dormidos o cualquier otra actividad agradable. Son muchas las preguntas que me hago acerca de todo en general, acerca de mi misma, y de lo que es más importante, acerca de mis posibilidades, de mis límites, de mis paciencias.

Cómo será ese primer viaje, como ese primer encuentro con Monika (la responsable de los voluntarios), con mis compañeros de aventura, con los chavales, con el lugar, con Florencia, con el italiano, conmigo misma.... De momento lo que mejor se me da es echar de menos lo insalvable, las distancias, a tí...